martes, 14 de noviembre de 2017

Afuera

Y ser primero y ser el último al mismo tiempo, 
no encajar en las normas, la ley y el tiempo, 
siempre solo, sin voz, sin rostro, 
la mano siempre huérfana, en pausa, 
al otro lado de la vida.

jueves, 2 de noviembre de 2017

Incertidumbre

Todo es tan incierto, 
hasta el mismo pasado que me precede, 
dudoso, trémulo. 
¿A qué hora despertara el ruiseñor? 
¿Duerme acaso?,
¿Practica sus cantos? 
o como yo en la intermitencia que desgasta a la noche, 

ni durmiente, ni vigilante, cansado.

viernes, 6 de octubre de 2017

Ven

El cansancio es mi manto esta noche, 
solo necesito una cosa, un gesto, 
la caricia adeudada, 
la palabra más sencilla, 
ven. 

sábado, 23 de septiembre de 2017

Certeza

No lo sé, 
pero supongo que habrá dicho muchos te amos que quedaron al viento o al borde del patio que el rocío mojó, 
no lo sé, 
pero supongo que alguno fue para mí, como un error o como la hoja que cae involuntariamente del árbol. 

No lo sé,
pero supongo que me amaba, en lo oscuro del abismo se saben muy pocas cosas, 
no lo sé, 
pero supongo que me extrañó alguna vez, o no, al final del camino la memoria solo habla para si.


No lo sé, 
por ahora solo tengo la certeza que habrá de amanecer. 

sábado, 26 de agosto de 2017

Briscar

Irse a dormir y con suerte soñarte, 
nunca a tu lado, siempre contigo
y la aurora briscada de esperanza

habla de lo posible.  

sábado, 12 de agosto de 2017

Involuntario

Yo no quiero llorar pero lloro, 
tampoco quiero reír y a carcajadas me lleva la vida en un llanto que se parece más la madre que pierde al hijo que las nubes descargando su aliento. 

Yo no quiero esperar y espero,  
¿Habrá valido el canibalesco dolor de los minutos un centímetro de paz? 
¿La del sepulcro o la de la vida terrena? 


Yo no quiero querer y quiero, 
las palabras, el cuerpo y las falsas promesas enunciadas,
yo sé, no habrá de venir, no habré de ir, 
¿Qué consuelo queda cuando no hay mucho que hacer?

viernes, 26 de mayo de 2017

La

La inusitada, la que todos buscan pero al hallarle le temen. 
La andariega, la que nadie mira con buenos ojos. 
La mendiga, esa que come la sobras que rodaron de la mesa. 
La perfumada, oliendo siempre a jasmin y luego a tedio. 
La que a hurtadillas recibe la nada de besos que son dibujos. 
La desprovista de cartas y verdad. 
La mil veces señalada. 
La olvidada por días, meses, años.
Esa otra a la que odio tanto, 
la que se me repite en cada historia, 
esa, esa también soy yo.

martes, 4 de abril de 2017

Nadie


La fiesta,
el jolgorio,
el deseo,
la espera en silencio.

La reserva,
el color,
el sosiego,
la meticulosa suspensión.

La hora,
el moviento,
el mareo,
el desbocado desenfreno.

Un golpe,
el otro
y otro más,
el fallido,
el que roza,
el certero,
el que quiebra,
el que duele en las entrañas
el que produce el orificio,
el que deja ver lo que caja de Pandora posee,
el final,
el estruendo,
el que estremece su ya maltratado ser;

y
vomitando la vida,
desparramando las entrañas,

vacía y queda,
olvidada y sola,
no sirve y lo sabe,

después de rota,
nadie ama a la piñata.